Antonio Machado Ruíz, poeta sevillano, perteneciente a la Generación del 98, nació el 26 de julio de 1875, y falleció en Collioure (sur de Francia), el 22 de febrero de 1939. Contaba con 63 años y acababa su penosa odisea al final de la Guerra Civil española.
En el ya lejano curso académico de 1976-1977, en plena transición política española a la democracia, estudiaba yo el ya extinto COU. Contaba con 16 años y era pleno adolescente. Aunque ya sabía de Machado en clases de Lengua en cursos anteriores, ese curso fue cuando realmente descubrí a Machado. Tuve que leer sus Poesías Completas como obligación para el exámen de la temible Selectividad. Me encantó ese descubrimiento, sobre todo las lecturas de Campos de Castilla, libro encantador. En la primavera supe del dico de Serrat, pero no lo pude comprar hasta el año 1986, con mis primeros sueldos. Ambos, libro y disco, los releo y oigo con asiduidad.
Desde entonces, Machado ha sido y es mi poeta favorito. El librito me acompaña a veces en viajes y es un objeto familiar para mí. Pero lo que no pude fue leer una biografía del poeta. En aquellos años la información no era tan fácil como hoy con Internet. Hacia 1994 supe de la existencia del libro de José Luis Cano. En 1995 lo compré y lo devoré.
En mis frecuentes excursiones a la ciudad de Segovia, la cual me encanta, casi siempre, en mis paseos lentos y relajados, mi piernas me llevan a la calle Desamparados, su residencia segoviana. En mis visitas a Soria, en una de ellas, pude visitar sus lugares de paso: San Polo, San Saturio, la tumba de Leonor, la Audiencia, la Laguna Negra de Urbión relacionada con Alvargonzález, etc. En otoño de 2007 pude visitar Úbeda y Baeza por primera vez, y ver su Instituto y su aula.
Antes, en 2006, el célebre hispanista hispano-irlandés Ian Gibson publicaba, por fin, la biografía que esperaba: Ligero de equipaje, la vida de Antonio Machado. En la Feria del Libro de Madrid, en la primavera de ese año 2006, compré el libro, acompañado y animado por un compañero, profesor de Lengua. Esa primavera devoré rápidamente el libro, entre comentarios con mis compañeros de Lengua. El libro era para mí un auténtico tesoro, una joya. Vayamos a un resúmen de la vida del poeta basado en ese libro.
SEVILLA, MADRID, PARÍS Y SORIA
Nació en Sevilla, en julio de 1875, en el palacio de las Dueñas, donde vivía su familia. Sevilla contaba en aquellos momentos con unso 130.000 habitantes. Poco vivió en ella, pues con ocho años llegó a Madrid con su familia.
Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla,
y un huerto claro donde madura el limonero;
(...)
En septiembre de 1883 llega con su familia a Madrid, a la calle de Claudio Coello 13, en el moderno, cuadriculado y burgués barrio de Salamanca. Inicia sus estudios en la Institución Libre de Enseñanza. No sería el único domicilio: Santa Engracia 52, Alcalá 110 y Apodaca 5. Luego siguió el cambio de residencia pero, ya en la calle de Fuencarral: números 46, 98 y 148, siendo este último número el más duradero. A los dieciocho años se queda huérfano de padre.
Calle de Fuencarral, Madrid:
Hospicio y actual Museo Municipal
No fue buen estudiante: acabó el bachillerato con casi veinticuatro años. Sin embargo, en estos años de juventud tiene una vida cultural intensa: con casi veintitres años, en 1898, viaja a su natal Sevilla, donde se enteran de la guerra contra USA; en junio de 1899, con casi veinticuatro años, conoce París con su hermano Manuel, instalándose en el Barrio Latino. De nuevo en Madrid, en 1900 acaba por fin el bachillerato. En 1902 vuelve a París unos meses.
Pero es en enero de 1903, con veintisiete años publica Soledades. Su admirado maestro Giner de los Ríos le anima a opositar a catedrático de francés. El 4 de abril de 1907 consigue la cátedra. El día 5 elige Soria como destino. Cuenta con treintaiún años. Iniciaba una nueva etapa de su vida. A fines de mes visitaba la ciudad que le marcó de por vida.
FAMILIA DE MACHADO
Padres: Antonio Machado Álvarez y Ana Ruíz Hernández.
Hermanos: Manuel Machado, Antonio, José (3 hijas), Joaquín (3 hijas), Francisco y Cipriana.
4 comentarios:
A mí, Machado, don Antonio por supuesto, siempre me ha gustado mucho. Creo que se debe a su estilo sencillo, nada rebuscado, pero profundo a un tiempo, lleno de metáforas sobre el tiempo que pasa y la vida que transcurre: "caminante son tus huellas el camino y nada más".
Un andaluz enamorado de Castilla, como todos los de su generación que, curiosamente, ninguno era castellano.
Un hombre sencillo, algo desaliñado: "ya conocéis mi torpe aliño indumentario", que no se merecía el pago del exilio por su poesía, porque, como decía él. "al cabo nada os debo, debéisme cuanto escribo".
Un saludo y a por la parte segunda.
El poeta de los poetas, el más hondo de su generación, el que no tuvo nada al exilliarse, el que no fue chaquero, el que murió íntegro y con honor: desnudo como los hijos de la mar.
Ancha y llana es Castilla como el pecho de un varón...
la verdad es que la poesía no es mi fuerte, de Machado conozco muy poco de su obra quizá el fragmento que mejor conozco es el que aparece en el inicio del Agila de Extremoduro... ejem...,
por lo que sé este hombre estuvo marcado por la tristeza, la generación del 98 fue una generación triste marcada por el fin del sueño de grandeza del imperio, y para remachar la guerra civil, el exilio en condiciones penosas para terminar muriendo yo creo que de pena.
Un saludo y gracias por acercarnos a Antonio Machado...
Te recomiendo José Luis que leas "Campos de Castilla", obra genial y más famosa del poeta.
Saludos y ya pondré más entradas de su vida para que sigas conociendo a don Antonio.
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